Un diseño para los niños Tercermundistas (de Tanzania, Rwanda, Burundi, Somalia, Congo, etc.) quienes difícilmente disfrutan de un juego de fútbol, ya que son tan pobres que no pueden comprar un balón (aparte de sufrir por guerra y desastre natural actual).
Jugar un partido una tarde cualquiera los ayuda a escapar un poco de esa vida. Sin embargo, lo hacen con una pelota hecha de bolsas de plástico u hojas de palma.
Es por ello que este proyecto se enfoca en darles un poco de esperanza, proporcionándoles un balón económico, puesto que son elaboradas con las cajas en las que se les envía ayuda (éstas tendrían los patrones impresos para armarlas).
Una idea que me parece excelente, y además, amistosa.
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